Una de las participantes comparte aquí su experiencia.
¿Qué está siendo para ti el Seminario Intensivo de Ejercicios?:
Ante todo, un regalo. Profundizar en el Libro de Ejercicios Espirituales de San Ignacio está siendo para mí una ayuda en mi relación con el Señor, un abrir horizonte en la manera de encontrarle presente en la vida, dándosenos. Me está ayudando a ordenar todas las cosas para hacer espacio al amor que Dios nos da.
Entrar en esta Casa de Espiritualidad de Manresa es ya empezar a percibir que "el mismo Señor desea dárseme en cuanto puede" (EE234): en el Equipo que nos da el Seminario con tanta profundidad y unción; en los compañeros; en la Cueva en la que Dios derramó sobre Ignacio este legado de "amor y gracia" que hoy llega a nosotros; en el horizonte inmensamente bello en su amanecer y atardecer con las montañas de Montserrat; en la Capilla del 4º piso que es la Cueva de Ignacio hoy, que nos invita a ser espacio abierto, confiado para dejarnos alcanzar y llenar por el Señor; que nos invita a disponernos para escuchar, para dejarnos elegir; que nos invita a contemplar y dejarnos hacer como Cristo...
Está siendo también para mí una experiencia de Iglesia: compartimos el tesoro de la espiritualidad ignaciana un grupo de jesuitas, laicos, sacerdotes, religiosos/as de distintas congregaciones. Es algo muy profundo y verdadero lo que nos une, y hay entre nosotros una apertura que nos lleva a compartir nuestra vivencia de Ejercicios Espirituales, y nos enriquece en la fe y en el deseo de acompañar a otras personas para que también puedan encontrarse con el Señor en el camino que nos ha dejado San Ignacio.
GRACIAS por tanto bien recibido.
A ti, por tu testimonio.
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